Ir arriba

Chat de Fiebre Azulgrana

http://www.meebo.com/rooms

lunes, 20 de agosto de 2007

Sevilla Supercampeon



El Sevilla no especuló en el Bernabéu. Le dio una lección de fútbol al Madrid, con una primera parte asombrosa y un final de partido memorable. Kanouté hizo un hat trick y Renato los otros dos. Quinto título en menos de año y medio. Alucinante e inolvidable.

Prometía este encuentro. Era obvio que la vuelta iba a ser movidita. Pero ciertamente nadie en su sano juicio apostaba por un primer tiempo tan vertiginoso ni por un partido como el que se vio. El Bernabéu es de esa clase de campos en los que hay que salir a jugar, no sirve esconderse porque el Madrid siempre te acaba matando. El Sevilla salió adelante, buscando el gol, enseñando las uñas, mordiendo a los locales. Si los merengues pensaban que el conjunto nervionense iba a especular, a aguantar el resultado del partido de ida, estaban bastante equivocados.

Este Sevilla poderoso que juega como una máquina, estilo apisonadora total, no tardó el golpear. Lo hizo gracias a una jugada a balón parado. Duda la puso en el área, Poulsen remató, desvió Casillas y el danés cogió el rechace y lo cedió atrás donde Renato remató a placer (0-1). El Sevilla se comía a los blancos, pasaba como Pedro por su casa por aquel campo en el que levantó un título hace bien poco. Pero al Madrid no se le puede dar vida, ni un metro. Lo demostró Drenthe con un tremendo zapatazo que sorprendió a Palop (1-1). El estadio se volcaba con su equipo, pero los de Juande no se achicaban. Nada de cobardes. El fútbol es para valientes y el Sevilla reaccionó pegando duro, con un testarazo perfecto, con todos los tiempos incluidos, de Renato a pase desde la siniestra de Duda (1-2). Gol y silencio en las gradas. Más aún cuando Pepe cometía penalti con una clara mano y Kanouté batía con su bendita pasividad a un Casillas que no sabía a esas alturas por donde le caían los mamporros (1-3). La historia era feliz en un primer tiempo para rememorar. El Sevilla se gustaba, controlaba la situación. En cambio, los contratiempos volvieron a jugarle una mala pasada a los hispalenses. Porque el Madrid acortó distancias de nuevo en una jugada aislada, a uno del descanso, con un cabezazo de Cannavaro, que incomprensiblemente estaba totalmente sólo en un tremendo fallo de marca de la zaga. Con el sorprendente 2-3 se llegaba al intermedio.

En la reanudación el Sevilla bajó la intensidad. El Madrid era el que tenía que jugarse el tipo. Los merengues salieron con todo mientras los andaluces esperaban atrás, controlando la situación en todo momento. El juego áereo, que siempre venía por la zurda, era la vía de ataque local predominante. En alguna ocasión rozaron el tanto, pero unas veces la falta de precisión y en otra ocasión una magnífica intervención de Palop servían para seguir encarrilando la final conforme pasaban los minutos. El partido se ponía duro, Sergio Ramos enseñaba sus botas más de la cuenta sin ser amonestado. Los hispalenses no se volvían locos, para nada, mostrando gran consistencia atrás, con un Fazio espectacular, que compartía el centro de la zaga con Poulsen, ya que en el descanso Mosquera fue sustituido por Keita.

La segunda parte era tosca. No había fútbol porque quien atacaba sólo optaba por colgar balones. Metían de esa forma presión los madridistas y así Sergio Ramos lograba el 3-3, a saque de una falta. Quedaban en ese momento doce minutos y los de Schuster necesitaban dos goles para remontar el título. El pánico a perder todo lo bueno en un santiamén hizo presencia por instantes. Sólo instantes ya que el Sevilla volvió a demostrar su poderío, su raza ganadora. Sólo hizo falta que el Madrid le amenzara un poco para que los nervionenses hicieran gala de su superioridad. Con el empate se retornó al ataque. Alves y Navas se inventaron una de sus típicas jugadas por la diestra, el brasileño la puso al área y allí Kanouté le ganó la partida a Pepe y Casillas para mandar el cuero adentro (3-4), a placer, poniendo el punto y final a un partido que todavía iba a deparar más alegrías.

Así acabó el partido, con una lenta agonía local, con las gradas del Bernabéu despoblándose poco a poco, con el Sevilla bailando al Madrid, con los de Juande disfrutando del éxito, saboreando el título, otro más, esta vez ante el Madrid, con dos victorias claras, escribiendo otra brillante página más en la centenaria historia nervionense, haciendo más grande las siete letras que forman Sevilla, sacando de quicio a Pepe que se autoexpulsaba con un fea entrada, marcando el quinto, de nuevo a placer, de nuevo de Kanouté a pase de Kerzhakov (3-5), cerrando el malí un hat trick que no podrá olvidar nunca, cerrando una completa profanación de Chamartín, una humillación en toda regla al Madrid, otra noche histórica... De nuevo la grandeza, de nuevo campeonando, de nuevo la gloria, de nuevo una gesta, un 3-5 al Madrid, de nuevo dando la nota en el fútbol, de nuevo machacando al que se le pone por delante, dejando chicas las vitrinas, pentacampeonando. La grandeza. Y que bien sabe.

Fuente: http://www.sevillafc.es/

1 comentario:

Anónimo dijo...

FELICIDADES AL SEVILLA SOLO PUEDO QUITARME EL SOMBRERO ANTE UN EQUIPO QUE LE METE UNA MANITA A MI ETERNO RIVAL....VAMOS QUE ME HICIERON MUY FELIZ JEJEJEJE GEU8

Última hora SPORT

ÚLTIMA HORA AS

Última hora MARCA

Créditos

Dirección y diseño: Gio
Redacción: Gio
Colaboraciones: Geu, Javi
Clasificaciones, Último partido, A vista de pájaro: www.fcbarcelona.cat
El Marcador: www.marca.es
Imágenes: Sport, Mundo Deportivo, As, Marca